En el paraje conocido como la Cañada de las Azadillas, se encuentran estas magníficas paredes conocidas como Tajo de las Alcandoras.
El acceso se realiza por un bonito sendero entre pinos con una intensa subida al final.
Como casi todas las vías de esta zona, se encuentra prácticamente desequipada, a excepción de las reuniones.
Comienza por un diedro de 5+, algo más comprometido de lo que me hubiera gustado para empezar.
Alguna placa técnica se entremezcla entre fantásticos diedros y fisuras.
El bonito paisaje del valle acompaña la escalada hasta el final.
Sierra Nevada en el horizonte cautiva la mirada. En esos mismos momentos dos compañeros iniciaban su aventura por ella.
El descenso se realiza caminando, aunque no exento de peligros y lleno de bonitos parajes.
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El acceso se realiza por un bonito sendero entre pinos con una intensa subida al final.
Como casi todas las vías de esta zona, se encuentra prácticamente desequipada, a excepción de las reuniones.
Comienza por un diedro de 5+, algo más comprometido de lo que me hubiera gustado para empezar.
Alguna placa técnica se entremezcla entre fantásticos diedros y fisuras.
El bonito paisaje del valle acompaña la escalada hasta el final.
Sierra Nevada en el horizonte cautiva la mirada. En esos mismos momentos dos compañeros iniciaban su aventura por ella.
El descenso se realiza caminando, aunque no exento de peligros y lleno de bonitos parajes.
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